El acabado superficial del acero aleado cambia significativamente después de la nitruración debido a la formación de una capa dura y resistente al desgaste en la superficie. Estos son los cambios y características clave del acabado superficial posterior a la nitruración:
Resistencia al desgaste mejorada: la formación de una capa dura de nitruración en la superficie del acero mejora en gran medida su resistencia al desgaste. Esta capa actúa como barrera protectora contra el desgaste mecánico, reduciendo la pérdida de material durante el contacto por fricción. La resistencia al desgaste mejorada de la capa nitrurada es particularmente beneficiosa para componentes en entornos de alto desgaste, como cojinetes, piezas de válvulas y tornillos de extrusión. La superficie nitrurada reduce la frecuencia de mantenimiento y reemplazo, lo que lleva a menores costos operativos y una mayor eficiencia en la maquinaria.
Rugosidad de la superficie: la nitruración puede causar un ligero aumento en la rugosidad de la superficie debido a la formación de nitruros. El acabado superficial inicial del acero aleado juega un papel importante en la determinación de la rugosidad final posterior a la nitruración. Las superficies finamente mecanizadas o pulidas tienden a mantener un acabado más suave, mientras que las superficies más rugosas pueden experimentar un aumento más notable de rugosidad. Este cambio en la rugosidad se puede minimizar controlando los parámetros del proceso de nitruración y utilizando técnicas de acabado posteriores a la nitruración, como pulido o esmerilado, para lograr la textura superficial deseada. Mantener un acabado superficial suave es crucial para aplicaciones donde se requiere baja fricción y alta precisión.
Cambio de color: la superficie del acero aleado nitrurado generalmente presenta un cambio de color, que va del gris oscuro al negro. Este cambio de color se debe a la formación de nitruros de hierro en la superficie. La superficie oscurecida es un indicador visual de un proceso de nitruración exitoso y también puede proporcionar cierto grado de resistencia a la corrosión. El cambio de color uniforme mejora el atractivo estético del componente y sirve como marcador de control de calidad para un tratamiento de nitruración consistente en todos los lotes.
Estructura de la superficie: la nitruración crea una estructura superficial compleja caracterizada por la formación de una capa compuesta, también conocida como capa blanca, en la superficie superior. Esta capa compuesta está formada por nitruros de hierro, principalmente ε-Fe2-3N y γ'-Fe4N, que contribuyen a una mayor dureza y resistencia al desgaste. Debajo de la capa compuesta se encuentra la zona de difusión, donde los átomos de nitrógeno han penetrado en la matriz del acero, mejorando sus propiedades mecánicas. La capa compuesta suele ser muy delgada (unos pocos micrómetros), pero desempeña un papel fundamental en la protección del material subyacente contra el desgaste y la fatiga. Esta estratificación estructurada mejora el rendimiento general y la longevidad del componente.
Resistencia a la corrosión: el proceso de nitruración puede mejorar la resistencia a la corrosión del acero aleado formando una capa protectora de nitruros en la superficie. Estos nitruros actúan como una barrera, impidiendo la entrada de agentes corrosivos y reduciendo la tasa de oxidación y formación de herrumbre. Esta mejora en la resistencia a la corrosión es particularmente beneficiosa para componentes expuestos a entornos hostiles, como equipos de procesamiento químico, aplicaciones marinas y piezas de automóviles. La resistencia a la corrosión mejorada extiende la vida útil de los componentes y reduce la necesidad de mantenimiento frecuente o recubrimientos protectores.
Integridad de la superficie: la nitruración mejora la integridad superficial general del acero aleado al inducir tensiones residuales de compresión en la capa superficial. Estas tensiones de compresión contrarrestan las tensiones de tracción que pueden provocar la iniciación y propagación de grietas, mejorando así la resistencia a la fatiga del componente. La integridad de la superficie mejorada garantiza que los componentes nitrurados puedan soportar cargas cíclicas y extender su vida útil operativa en aplicaciones exigentes. La capa nitrurada también proporciona una mejor resistencia al impacto y a los ciclos térmicos, lo que la hace adecuada para entornos dinámicos y de alta temperatura.
Barra cuadrada de acero inoxidable.